1969, el año en el que cuatro países ganaron Eurovisión
España, Reino Unido, Países Bajos y Francia empataron con 18 puntos cada uno
A lo largo de la historia de Eurovisión, el ganador del micrófono de cristal siempre ha sido un único país. Sin embargo, en 1969, ocurrió un inesperado empate de cuatro países. España, Reino Unido, Países Bajos y Francia empataron a 18 puntos cada uno, marcando una edición histórica del festival.
El festival se celebró por primera vez en España, en el Teatro Real de Madrid. España ya había ganado el año anterior con “La, la la”, interpretada por Massiel. Este año, Salomé representaba el país con su alegre canción “Vivo cantando”, vestida con su icónico mono de flecos azul diseñado por Manuel Pertegaz. Además, la retransmisión de esta edición fue muy especial, ya que marcó la llegada de la televisión en color a las casas españolas.
El método de votación en 1969 era distinto al actual, y fue el causante del cuádruple empate de ese año. Al igual que el año anterior, cada país otorgaba un total de diez puntos a sus canciones favoritas, distribuidos entre dos jurados que decidían de manera individual. Tenía el fin de evitar sesgos, pero hizo que el reparto de puntos fuera más disperso de lo habitual. No existía un reglamento capaz de llevar a cabo el desempate, ya que la premisa del concurso era que ganaba “la televisión o televisiones con más votos”. Así fue como, a pesar del desconcierto de los presentadores, los organizadores y de la propia Laura Valenzuela, se declararon ganadores a los 4 países.
Así se retransmitió por Televisión Española.
Este suceso no dejó descontento a España, sino sorpresa y alegría por haber ganado dos años consecutivos. En ese momento, se le otorgaron a los intérpretes los trofeos, que justamente eran cuatro, ya que originalmente se repartían entre el compositor, letrista, director de orquesta e intérpretes. Después del festival, se dieron los reconocimientos pertinentes al resto de componentes.
Sin embargo, en otros países las reacciones no fueron tan positivas. Llovieron críticas sobre la falta de previsión del reglamento, argumentando que la ambigüedad le quitaba credibilidad al festival. De hecho, Suecia protestó en las ediciones posteriores y no participó en la de 1970 para demostrar descontento con el sistema de Eurovisión.
Debido a esto, la Unión Europea de Radiodifusión (UER), se vió obligada a revisar el reglamento, y a partir de 1970, se introdujeron nuevas reglas que impedían un empate.
Desde entonces, el sistema de votaciones ha cambiado múltiples veces, incluyendo métodos de recuento de votos del jurado nacional y el voto del público.
Aunque todos compartieron el premio, cada actuación tiene algo diferente que les hizo entrar en el podio. Representando a España, “Vivo cantando” de Salomé destacó por su carisma. De parte de Reino Unido, “Boom Bang-a-Bang” de Lulu atrajo a los más nostálgicos. Países Bajos presentó a Lenny Kuhr con una balada folk emotiva llamada “De Troubadour”. Por último, Frida Boccara con “Un jour, un enfant” se convirtió en un clásico de Francia en la historia del festival.
Sin duda, el festival de Eurovisión de 1969 no solo trajo una buena anécdota consigo, sino la transición hacia un festival más moderno, del que podemos gozar a día de hoy.